Los Diputados Nacionales que integran el grupo presidido por Rodrigo de Loredo –con excepción de Julio Cobos y Fabio Quetglas– votaron en contra del proyecto de creación de una Comisión Investigadora del tema “$Libra” impulsado por el radical Pablo Juliano. Ese voto negativo carece de justificación, salvo el compromiso notorio y reiterado de sus integrantes con el gobierno ultraderechista, arbitrario y enemigo de la justicia social que preside Milei.
En primer lugar, porque ese grupo de legisladores llegó al Congreso Nacional propuesto por la UCR y las definiciones públicas, las políticas socioeconómicas, las actitudes y el lenguaje de Milei son exactamente las opuestas a las que defendió –y debe seguir defendiendo- el radicalismo.
En segundo lugar, porque los argumentos que alguno de esos legisladores invocó para justificar ese voto -el hecho de que existan investigaciones judiciales en trámite sobre el tema de las criptomoneda auspiciada por Milei-carece de validez: la Justicia investiga la presunta comisión del delito de estafa con la intervención del Presidente de la República como partícipe necesario. La Cámara de Diputados –en ejercicio de su función de control parlamentario- debe investigar y corregir las graves consecuencias político institucionales generadas por esa intervención presidencial.
En tercer lugar, porque el voto negativo de ese grupo de legisladores implica el voluntario abandono de la visión ética que el radicalismo sostuvo a lo largo de su existencia, que alcanzó con Arturo Illia el más alto nivel de coherencia y ejemplaridad.
Juan Manuel Casella 10 de Abril de 2025